Este blog me vió crecer.
Sabe mis peores cosas.
Mis mayores secretos.
Todo aquello que sentí alguna vez,
si fue importante: lo escribí acá.
Cuando amé,
cuando dejé de amar,
cuando fui feliz,
cuando me desilusioné,
cuando me equivoqué,
cuando se equivocaron conmigo,
cuando no sabía qué hacer,
cuando no tenía en quién refugiarme..
creo que nunca en mi vida
voy a dejar de escribir acá.
Cuando sea, donde sea, como sea.
Escribir es lo único
que dentro de todo,
me hace reflexionar.
Bajo mil cambios
y veo todo desde otra perspectiva.
A veces colapso, como todos.
Pero si empiezo a leer todo
desde el primer post que hice,
no siento arrepentimiento alguno.
Porque siempre escribí
lo que sentía en el momento.
No puedo arrepentirme
de algo que sentí,
porque sé que en su momento
fue genuino ese sentimiento.
Ya sea amor, odio, angustia o felicidad.
Me hace bien saber
que nunca me mentí a mí misma.
Que nunca me conformé
con algo que creía que podía ser mejor.
Siempre busqué y busco más.
Más de mí, más de los demás.
No me conformo, ese es el tema.
No es que nada me viene bien,
sino que siempre quiero más
porque sé que se puede.
En fin, quiero mucho a este blog (:
No hay comentarios:
Publicar un comentario